El complemento que nos indicará cuándo debemos dar una vuelta al volante de nuestra plancheta, tanto en su versión manual como motorizada, es un temporizador capaz de repetir automáticamente un ciclo con tiempos predeterminados tanto de activación como de pausa.Aquí les presento el esquema del que utilizo habitualmente.
Se trata de un temporizador repetitivo, cuya alimentación puede ser a pilas o batería, ya que el circuito funciona con una tensión entre 9 y 12 voltios y su temporización comprendida entre 1 segundo y 120 segundos.
Los diodos LED, actúan como testigos de la temporización y una vez calibrado convenientemente, nos indicarán con sus destellos, cuándo debemos girar el pomo o volante de nuestra plancheta.
P1 controla el tiempo de reposo; P2 el de activación.
Una vez calibrados ambos con ayuda de un cronómetro, el circuito comenzará a funcionar encendiendo alternativamente uno u otro LED según el tiempo que le hayamos dado, a partir de 1 segundo de su encendido y por tiempo indefinido hasta que lo apaguemos ( en mi caso calibrado a 15 segundos que corresponde a 1/4 de giro del pomo de la plancheta).Es decir: Cuando se enciende un LED, daremos 1/4 de vuelta al pomo; el otro LED se encenderá al cabo de 15 segundos que será cuando demos nuevamente otro 1/4 de vuelta y así sucesivamente cada 15 segundos.
Los contactos del relé se abrirán y cerrarán al mismo ritmo que los LED y de utilizarse el motor, éste podrá operarse utilizando las salidas 1, 2 y 3 ( en este caso deberemos calibrar el temporizador a 1 minuto).
El conjunto se alojará en el interior de una caja de aluminio, pintada con el consabido ” negro mate”, dejando dos orificios por donde saldrán las partes superiores de los LED (que deberán ser de color rojo para poderlos distinguir en la oscuridad ) y otro para el interruptor de encendido.